Grita a su tripulación que se aleje y accede de nuevo al interior del avión para recoger dos extintores de mano, no sin antes detenerse para decirle a su copiloto que volverá a por él una vez extinguido el fuego. Repite final al año siguiente en su segunda participación y el rival esta vez es el Bayern de Múnich, que arrebata el título a los valencianistas en la tanda de penaltis.